Hace mucho años que quería leer este libro, pero hace muy poco que volvieron a editarlo y hacerlo accesible (como todas las obras de esta señora). En general la historia va acerca de los jóvenes que durante el siglo XVIII eran castrados para hacer de ellos “estrellas” de la ópera; el protagonista es Tonio, un chico con una sórdida historia familiar que se ve obligado a vivir de una manera que nunca imaginó.
Pues bien, es hijo de un importante patricio en el Véneto y la segunda esposa de este, una chica cuyo vicio por el alcohol la tiene cada vez más perturbada. Luego el pasado de Tonio se revela y él es mutilado y enviado fuera de Venecia, puesto a cargo de un maestro castrato que lo convertirá en un gran cantante y lo llevará muy lejos (además de tirárselo y liarlo en una relación profesor-alumno un poco catastrófica). Claro que el chico se pone todo rebelde al principio por su malísima suerte y llora y todo lo demás, sin embargo decide que se vengará del que lo convirtió en un “fenómeno” (pues así se considera) no importa cómo lo haga ni cuanto se tarde en ello. Al final, la forma en que lo logra… ufff, justo como lo esperé.
Una de las cosas que más me fascina de Rice, no importa si se trata de brujas, vampiros o castrados, es que cuando sus historias se sitúan en tiempos pasados siempre logra transportarme a la época y al lugar. Tan es así que, casi siempre, me sumerjo tanto en la lectura que se me olvida donde estoy parada, y de repente ya me encuentro junto a los personajes (si no es que en el lugar de alguno de ellos), observando los lugares, sintiendo el frío o el calor o la lluvia o lo que carajos esté pasando… oliendo el ambiente.
Pueden decir que es mucha pinche locura mía, no sé, pero así me pasa. Y por lo general me pasa con la mayoría de sus libros (excepto los de la Bella Durmiente donde me costaba trabajo alucinarme porque mi mente estaba demasiado ocupada en imaginar tanta perversión bizarra… y eso que en lo de las perversiones ya andaba bien instruida, jeje). Pero el punto no es ese.
En este libro hay mucho amor gay, no apto para homofóbicos. Y también un poco de masoquismo ¿por qué no decirlo? La verdad es que eso me chocó un poco, arrrrgh, odio eso de las humillaciones voluntarias. Aunque sí, debo confesar que hay pasajes que resultan un poquito (sólo un poquito) excitantes… Y también debo decir que al principio no me quedaba bien claro como podían relacionarse íntimamente entre castrados (tuve que investigar cuales eran las consecuencias y secuelas de la castración para quitarme esas dudas).
Y el tema dominante, por supuesto, es la música. La música a un nivel que sí llega a parecer abrumador. Todos esos conceptos sobre la voz como instrumento musical y lo que se puede hacer o no con ella. Hum… hay momentos en los que parece más un manual que una novela. En fin, esas partecillas medio aburridas se compensan ampliamente con lo de más.
El final… pues el final me gustó. Digo, realmente la forma en que se va a vengar puede deducirse desde hartas páginas antes, pero creo que eso me mantuvo más atenta y a la expectativa de si sería como yo lo imaginaba o qué. Y bueno, no podía faltar un montón de deliberación filosófica de último momento (mientras la vida de uno está en las manos del otro) sobre la maldad humana, la muerte, la reconciliación con uno mismo y shalala y shalala.
Quizás volvería a leerlo, sólo por todas esas veces que me hizo soltar un grito de angustia o de sorpresa, o estar al borde de la lágrima… Ay ya, qué cursi soy. Total, supongo que tenía que hacer este post o sería como no haberlo leído. Jaja. Besos!!