Busqué la luz de tus ojos
En el fondo de las botellas de whisky,
Pero cuando llegaba ahí
Ya estaba demasiado perdida
Como para poder distinguir nada,
Las estrellas se apagaban y prendían
Para burlarse de mí,
Y tus ojos,
En la lejanía y tranquilidad,
Sueños bellos de una vida sin mí,
Soñaban.
¿Y qué si al perder el sentido
Confundo los truenos con tus dulces latidos?
Ignorando así
Que el cielo amenaza tormenta,
Entonces viene la lluvia
A limpiarme de aquello que no necesito,
Pero mi dolor y mi aflicción
Ni el alcohol ni la lluvia se los llevan.
Y llorando desgarradoramente,
Cual niño inocente
Junto al cadáver de su madre,
Entono canciones
De cómo mis manos perdí,
De cómo mis piernas perdí,
Y de cómo
‘sólo la boca me quedó para llamarte’;
Pero ni siquiera eso que quedó
Me es suficiente
Porque no importa que grite tan fuerte
Que las paredes retumben,
Que grite tan fuerte,
Que aquellas malditas estrellas se caigan,
Que me destroce la garganta
Diciendo tu nombre,
A tus oídos, mis lamentos
No llegarán más
Porque los ángeles no pueden
Escuchar a los demonios blasfemar.
Y las notas de tu guitarra
Me dan un poco de paz,
Pero no pueden
Sacarme del infierno,
El whisky sólo hace
Que las heridas ardan más,
Y lo único que puedo ver
Es tu imagen distorsionada
En los sucios fondos de cristal.
En el fondo de las botellas de whisky,
Pero cuando llegaba ahí
Ya estaba demasiado perdida
Como para poder distinguir nada,
Las estrellas se apagaban y prendían
Para burlarse de mí,
Y tus ojos,
En la lejanía y tranquilidad,
Sueños bellos de una vida sin mí,
Soñaban.
¿Y qué si al perder el sentido
Confundo los truenos con tus dulces latidos?
Ignorando así
Que el cielo amenaza tormenta,
Entonces viene la lluvia
A limpiarme de aquello que no necesito,
Pero mi dolor y mi aflicción
Ni el alcohol ni la lluvia se los llevan.
Y llorando desgarradoramente,
Cual niño inocente
Junto al cadáver de su madre,
Entono canciones
De cómo mis manos perdí,
De cómo mis piernas perdí,
Y de cómo
‘sólo la boca me quedó para llamarte’;
Pero ni siquiera eso que quedó
Me es suficiente
Porque no importa que grite tan fuerte
Que las paredes retumben,
Que grite tan fuerte,
Que aquellas malditas estrellas se caigan,
Que me destroce la garganta
Diciendo tu nombre,
A tus oídos, mis lamentos
No llegarán más
Porque los ángeles no pueden
Escuchar a los demonios blasfemar.
Y las notas de tu guitarra
Me dan un poco de paz,
Pero no pueden
Sacarme del infierno,
El whisky sólo hace
Que las heridas ardan más,
Y lo único que puedo ver
Es tu imagen distorsionada
En los sucios fondos de cristal.
3 comentarios:
Me gusta, es duro y desgarrador. Escribes muy bien, Karlita.
A mí también me gustó. Está muy bueno.
Te felicito
@alcoreze y Ana Laura: gracias por las porras, aprecio mucho que les guste!!
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